Llevo en peluquería desde el boom de 2015 cuando la barbería volvió a resucitar y a ser tendencia, la peluquería masculina despertó en mí un mundo nuevo me hizo ver la vida a color despertando en mi una felicidad orgullo y satisfacción personal por mi trabajo realizado con amigos y clientes.
Una sensación que jamás ante había sentido al realizar cualquier trabajo, desde ese momento llevo ejerciendo esta profesión con dedicación y pasión, cada cliente cada trabajo profesional que sale de nuestras peluquerías pasando por mi sillón o en manos de mi equipo Catalino Barber Shop es único y personalizado para cada cliente al 100%.
Aún así, sigo innovando en los trabajos que realizamos, la calidad y una perspectiva evolutiva adaptada a las necesidades y a las demandas del mercado.
Trabajando sobre todo en la fidelidad del cliente nos han hecho crecer y por eso invertimos en la nueva web donde podrás reservar citas desde tu móvil. También, podrás obtener información y descuentos adicionales con la comodidad de un clic.
No obstante, me considero uno de los barberos que han ayudado al resurgir la barbería y ayudar a dignificar nuestra profesión: he disfrutado recuperando unos servicios perdidos, tales como el arreglo de Barbas en el cual dedicamos el máximo cuidado y atención que se merece, e incluso el afeitado clásico a navaja con toalla aromatizada, así como los servicios de color.
Llegado a este momento de mi carrera profesional, se me ha abierto el camino de compartir mis conocimientos con mis compañeros de profesión, por lo que dedico parte de mi tiempo a la formación de peluquería masculina y barbería como colaborador de formaciones en academia Isaac Lyonell donde sigo formando y formándome.